jueves, 24 de febrero de 2011

Échamelo.

Ahí está ella, en un estado de valentía, con ganas de comerse el mundo, pero también con ganas de compartir el plato.

Masticando poquito a poco para conseguir que la bola baje paulatinamente hasta llegar al final.

¿De qué sirve cagarse en los demás cuando somos los primeros que no tragamos?

Reflexión meninas. Reflexión.

Feliz digestión.

2 comentarios:

menina tilia dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
menina tilia dijo...

Reflexioné menina y llegué a la conclusión que por más difícil digestión no podemos dejar de comer, aunque se hagan bolas grandes imposibles de masticar...podemos comer juntas,tomar un traguito de té y solita la bola bajará y seguro será más fácil su digestión.
Bon apetite!!;)